Medidas Paliativas

La energía se utiliza directamente en forma de combustibles diversos o se transforma en electricidad. Aproximadamente un tercio de la energía primaria se convierte previamente en eléctrica. El rendimiento de esta transformación en su conjunto es muy bajo, perdiéndose más del 60% de la energía primaria original, lo que hace que la electricidad represente la quinta parte del consumo final de la energía. A esto hay que unir los bajos rendimientos en el funcionamiento de electrodomésticos y equipos industriales. Por tanto la potencialidad de mejora del rendimiento total, en la producción y uso de la energía, son enormes.

El mantenimiento o el aumento del consumo debe realizarse sobre la base de las tecnologías cada vez más eficientes en la conversión de energía. Se están desarrollando nuevos sistemas de generación con combustibles fósiles (gasificación, ciclos combinados) que, junto con la cogeneración conllevan un apreciable incremento en la eficiencia de la conversión energética.

La cogeneración consiste en la producción conjunta, por el propio usuario, de electricidad o energía mecánica y térmica útil. Normalmente, las industrias satisfacen sus necesidades de energía térmica (para hornos y calderas) comprando el combustible necesario, mientras adquieren energía eléctrica para el resto de sus necesidades. La cogeneración, sin embargo, aprovecha el calor producido en las instalaciones de energía térmica para generar energía eléctrica y evitar comprarla fuera (glosario)

Por otra parte, más de la cuarta parte del consumo total de la energía en España corresponde a las viviendas (12'2%) y el uso de vehículos privados (15%). Como consumidores y ciudadanos tenemos la responsabilidad de utilizar racionalmente la energía, cambiando actitudes y planteamientos, que no se contraponen a la exigencia de mejora de las condiciones y calidad de vida así como de respeto hacia el medio ambiente.

A nivel institucional se han desarrollado distintas normativas, si bien los hechos más sobresalientes para el sector eléctrico ha sido el desarrollo de la Ley de Ordenación del Sector Eléctrico Nacional, la directiva Comunitaria sobre Mercado Único de la electricidad, la regulación de la Moratoria Nuclear y la congelación de tarifas.

Reconciliar y consolidar el binomio energía-medio ambiente es todavía un reto pendiente, siendo necesaria la potenciación e internalización del medio ambiente en las políticas empresariales, a través de la adopción de planes de gestión ambiental, el estímulo a las políticas de gestión de la demanda, y en definitiva impulsando el ahorro y la eficacia energética.

En definitiva, podemos decir que, entre las medidas orientadas a la mejora de la eficiencia y el ahorro energético, deben destacar:

- Aislamiento térmico de los edificios (arquitectura bioclimática), racionalización del consumo y mejora de la eficiencia.

- Autogeneración, a través de plantas de cogeneración y centrales eléctricas de ciclo combinado se puede ahorrar más del 30% de la energía térmica primaria destinada a la producción de electricidad

- Impuestos sobre la energía y las emisiones de CO2 para fomentar un uso más eficaz de la misma y el empleo de combustibles más limpios.