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La pintura de la tapa está
inspirada en la antigua leyenda mexicana “La Clanchana”, también
llamada Achane o Sirenita de Tilapa.
Se sabe que en las lagunas del río Lerma y del volcán
Xinantecatl (Nevado de Toluca) habitaba una criatura mitad pez, mitad mujer;
muy poderosa y encantadora. Ella estaba relacionada con los nacimientos
del agua, de los ríos, de las lagunas, y la pesca. Se comunicaba
con los pescadores; a veces les permitía gran abundancia de peces,
otras, si éstos no oían sus demandas, impedía que
cayeran presas en sus redes. Su comportamiento con las mujeres era benévolo.
Su largo cabello solía secárselo al sol sentada en las rocas.
Llevaba sus hijos, todos los animales del agua, en las axilas, en el pubis,
o colgados de la cintura. En ocasiones se transformaba en una serpiente
grande y negra. Se habla también de la presencia de un Clanchano,
y que juntos eran el padre y la madre del agua; espíritus de la
vida lacustre y todo lo tocante a la laguna.
Eran dioses, no sólo del agua y de sus frutos animales y vegetales,
sino tambien de las especies terrestres. Deidades de la tierra, de los
mantenimientos y de la fecundidad. Eran también la pareja primigenia.
Con esta visión, no estamos lejos de la convincente hipótesis
del ser humano anfibio que desarrollara la escritora galesa Elaine Morgan,
la cual sostiene que como especie nacimos en el agua. Esa es la razón
por la cual carecemos de vellosidad en el cuerpo como otros mamíferos
y nuestros bebés son capaces de nadar y flotar debido a su grasa
corporal, en recuerdo de nuestro pasado acuático. Se explica de
ese modo la larga melena que poseen los adultos humanos, que permitían
que se prendiesen las crías recién nacidas.
Todos sabemos que en todas las culturas, cuando los seres humanos imaginan
la más placentera situación, la visualizan a la orilla del
mar, en una bella playa arenosa, bajo el sol, junto a los árboles.
Estas son tal vez algunas de nuestras reminiscencias más remotas.
Desde la década de 1960, época en que el investigador Alister
Hardy delineó su teoría del simio acuático, Elaine,
por entonces una ama de casa, se transformó en una ardiente defensora
de dicha posición. Con el apoyo del propio Hardy escribió
varios libros sustentando un enfoque feminista del origen de la mujer.
Así surgieron sus conocidas obras: The Descent of Woman, The Aquatic
Ape y The Aquatic Hypothesis.
Durante más de 30 años fue ignorada por la comunidad científica,
en su mayoría hombres. Finalmente logró ser escuchada y hoy
su teoría aparece como la más probable.
María Esther Francia
Artista plástica
Información tomada de la antropóloga Beatriz
Albores de su libro “Graniceros”. |